Pyongyang, 27 de noviembre (ACNC) -- Tuvieron lugar el día 26 las elecciones de diputados a las Asambleas Populares de las provincias (o las ciudades directamente subordinadas al centro), las ciudades (o los municipios) y los distritos.
Los votantes acudieron a las urnas instaladas a lo largo y ancho del país con el deseo de consolidar aun más en esta ocasión el Poder popular y demostrar una vez más la superioridad del socialismo coreano, centrado en las masas populares.
Entre ellos se distinguían los precursores de la revolución, que recorrieron siempre la senda de patriotismo durante varios decenios desde la liberación de la patria (en agosto de 1945) depositando confianza absoluta en el Poder de la RPDC, así como los integrantes de nuevas generaciones, obreros y agricultores.
Los obreros y trabajadores agrícolas votaron a favor de los representantes del pueblo expresando la voluntad de apoyar al Poder de la RPDC con conciencia limpia, obligación moral y abundantes cosechas, al igual que sus predecesores.
Los candidatos a diputado tomaron la firme decisión de glorificar el régimen socialista más ventajoso del mundo, sin olvidar ni un momento la confianza y esperanza del pueblo.
Las elecciones de ayer sirvieron de oportunidad significativa para poner de pleno manifiesto el gran ánimo de todo el pueblo por consolidar por todos los medios el Poder revolucionario y lograr la prosperidad y desarrollo del gran Estado, uniéndose compactamente en torno al estimado compañero