Pyongyang, 12 de febrero (ACNC) -- El mundo hace bulla ante la "declaración fulminante" de EE.UU.
El día 4, la actual administración norteamericana publicó que su país recibirá la Franja de Gaza si se trasladan los palestinos de allí a otro lugar.
5 días después, declaró que comprará y gobernará esta tierra y podría distribuirla a otros países a fin de reconstrucción.
Se derrama todavía en este lugar la sangre y se agrandan las preocupaciones del interior y exterior sobre el vulnerable cese de fuego.
En este momento, consterna a todo el mundo la expresión violenta de EE.UU. que navega a contrapelo del rayo de la esperanza de los palestinos sobre la paz regional y la vida tranquila.
Tanto Palestina, Irán y otros países del Medio Oriente como los aliados occidentales de EE.UU. lo rechazan calificando de la "deportación coercitiva de los habitantes de Gaza", la "violación flagrante a la Carta de la ONU y las leyes internacionales", el "menosprecio del derecho de los palestinos a su autodeterminación", el "principal obstáculo de la medida de solución según la fundación de dos Estados" y la "locura imperdonable".
Se evidencia la naturalaza innata de EE.UU. que sustenta de la matanza y el saqueo, es decir, la ambición de dominación del mundo de carácter hegemónico y agresivo, no con la historia pasada sino con la realidad de Gaza.
El mundo conoce bien quién amparó y fomentó el crimen antiético de Israel abogando por su "derecho a autodefensa", quién ejerció el veto en reiteradas ocasiones a la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU con contenidos del inmediato alto al fuego, quién armó a los asesinos israelíes con los pertrechos sofisticados y quién invitó al delincuente al Congreso para animarlo.
Se escuchan en el interior del país hebraico las voces abiertas de que no puede hacer la guerra sin EE.UU. El medio de prensa internacional evalúa que la política de EE.UU. sobre el Medio Oriente constituye un factor principal del caso de Gaza.
Los hechos dejan saber claramente el expediente criminal de EE.UU., cómplice y patrocinador de la situación miserable de Gaza, convertida en una tumba colectiva y ruinas.
En vez de la reflexión mínima al respecto, las locuras de EE.UU. revelan su entraña bandidesca de ocupar finalmente la Franja de Gaza a mano de su lacayo colmado de la ambición de expandir el territorio y preparar así nuevo trampolín para realizar la estrategia de dominar al Medio Oriente.
Como ven todos, EE.UU. es el usurpador brutal que para satisfacer su interés, despoja a otro país y nación de su territorio jurisdiccional y derechos soberanos, para no hablar de infringir la vida y los derechos soberanos.
A citar otros ejemplos que violan las leyes internacionales y los principios, la actual administración norteamericana intenta usurpar Groenlandia, insistió en el derecho a administración de canal de Panamá y cambió el nombre del Golfo de México por el "Golfo de América".
No se pueden ser el regateo de EE.UU. la soberanía, el derecho a autodeterminación y la integridad territorial de un país y una nación.
La actual época no es el período en que los anglosajones, que cruzaron el mar, calentaban su cabeza con la exploración occidental luego de exterminar a los aborígenes americanos y atropellar su nido de vida.
Ya pasó la era unipolar en que EE.UU. fabricaba a su antojo las reglas y ordenes internacionales, fingiéndose única "superpotencia" del mundo.
EE.UU. debe poner inmediato fin a sus actos violadores, liberándose de la ilusión anacrónica. -0-
www.kcna.kp (2025.02.12.)